PUREZA VERSUS PORNOGRAFÍA Pastor Billy Wilson
Jueces 18 y 19 relata una de las más horrorosas, sangrientas historias descritas en el Antiguo Testamento completo.
En estos dos capítulos una de las más increíbles llamadas de alerta en la historia se lleva a cabo dentro del pueblo de Dios. El programa de hoy también tiene la intención de ser una llamada de alerta.
Jueces 19 comienza con un hombre, un levita que llevaba a su concubina de la casa de su padre en Belén de Judá. Luego viaja hacia su casa y pasa la noche en la ciudad de Gabaa. Allí los hombres de Gabaa procuraban tener relaciones sexuales con este hombre.
“Pero cuando estaban gozosos, he aquí que los hombres de aquella ciudad, hombres perversos, rodearon la casa, golpeando a la puerta; y hablaron al anciano, dueño de la casa, diciendo: Saca al hombre que ha entrado en tu casa, para que lo conozcamos. Y salió a ellos el dueño de la casa y les dijo: No, hermanos míos, os ruego que no cometáis este mal; ya que este hombre ha entrado en mi casa, no hagáis esta maldad” (Jueces 19:22-23).
Los hombres de Gabaa se dejaron llevar por su lujuria. El hombre levita les envía su concubina. Los hombres tuvieron relaciones sexuales con ella toda la noche y la abusaron. En la mañana ella fue encontrada muerta a las puertas de la casa. El levita reacciona a esta horrible tragedia.
“Y llegando a su casa, tomó un cuchillo, y echó mano de su concubina, y la partió por sus huesos en doce partes, y la envió por todo el territorio de Israel. Y todo el que veía aquello, decía: Jamás se ha hecho ni visto tal cosa, desde el tiempo en que los hijos de Israel subieron de la tierra de Egipto hasta hoy. Considerad esto, tomad consejo, y hablad ” (Jueces 19:29-30).
Hoy quiero decirle que la proliferación de pornografía en nuestro mundo debería ser la
llamada de alerta para la iglesia actual. Este sermón trata sobre un conflicto que es tan viejo como la civilización misma, como David y Betsabé, y tan vieja como esta historia de horror del libro de los Jueces.
No debe caber duda que la pornografía es una industria creciente. The American Family Association (La Asociación Americana para la Familia) dice que, “en los Estados Unidos hay más tiendas para la pornografía explícita que restaurantes McDonald’s, y el sexo por teléfono es ahora una industria de seis billones de dólares”. Un estudio de dieciocho meses, llevado a cabo por Carnegie Mellon University encontró que hay más de novecientas mil exhibiciones sexuales explícitas en el Internet.
Estamos viviendo en un mundo pornográfico. La mayoría de nosotros entiende que la pornografía es perversa, pero ¿por qué?
1. La pornografía distorsiona
2. La intención del propósito de Dios para la sexualidad es para la procreación, unión y satisfacción. La pornografía degrada la sexualidad a algo sucio, oscuro y corrupto. Nuestro ser sexual está en el núcleo de quienes somos. El sexo no es solamente un acto físico, es también espiritual. Muchas veces la palabra traducida en la Biblia para una relación sexual es “conocer”. El conocimiento más profundo posible. Dios constituyó esto para el matrimonio. Neibuhr declaró que, “todas las relaciones sexuales son relaciones personales, y el aventurarse en ellas sin un sentido de responsabilidad es degradante y destructivo para ambas personas”. El amor ha sido distorsionado en nuestro mundo.
1. La pornografía degrada
La pornografía degrada la vida humana. La pornografía muestra a las personas
como objetos en vez de creaciones de Dios. El participar en la pornografía rompe con la ley de Dios de amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos.
3. La pornografía domina
La pornografía domina o se vuelve adictiva. La pornografía tiene la capacidad de volverse tan adictiva como cualquier otra droga y más. Millones de personas alrededor del mundo han sido esclavizadas a la pornografía. “¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia?”
(Romanos 6:16). Usted puede volverse esclavo de la pornografía. “Nuestro cerebro es un órgano con necesidades químicas. El sexo llena al cerebro de endocrinas y encefalinas las cuales producen un sentido de bienestar. La actividad bioquímica que resulta de esto es la razón por la cual las fantasías sexuales son tan adictivas, especialmente para aquellos que tratan de evadir el sufrimiento emocional”. De tal manera que la pornografía produce una intensificación emocional y física que luego se transforma en una aminoración definitiva. Por lo tanto, cosas más crudas se requieren para conseguir dicha intensificación. La pornografía es perversa porque es adictiva y Dios quiere que usted sea libre.
4. La pornografía destruye
La pornografía destruye los hogares, las familias, las comunidades, y las naciones. Warren Burger, ex-presidente de la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos dice que, “la pornografía explícita deteriora la estructura de la sociedad”. En 1967 Dinamarca hizo legal la pornografía. En 1970 hicieron que la educación sexual fuera
obligatoria y prontamente removieron todas las edades de las leyes de
consentimiento. El aborto en demanda fue legalizado en 1973. Las prácticas sexuales que antes eran listadas como crimen, fueron removidas de los libros de estatutos. Hicieron que los anticonceptivos fueran gratuitos para cualquiera de cualquier edad. ¿Cuál fue el resultado de este experimento social con permiso? La violación incrementó a un 300%. Las enfermedades venéreas incrementaron a un 250% entre las personas de 16-20 años y un 400% entre los mayores de 16. Los abortos incrementaron a un 500%. La taza de nacimiento, y, edad de un primer contacto sexual disminuyó dramáticamente. El crimen y la pornografía siempre han sido aliados cercanos. La pornografía es una industria – un negocio multibillonario en dólares.
5. La pornografía corrompe
La pornografía corrompe las relaciones de intercambio personal y el corazón humano. La oscuridad se filtra en su corazón. “Teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos de la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón; los cuales, después que perdieron toda sensibilidad, se entregaron a la lascivia para cometer con avidez toda clase de impureza” (Efesios 4:18-19). La pornografía causa que el corazón de la persona se vuelva duro contra Dios.
6. La pornografía sentencia “¿No saben que los malvados no heredarán el reino de Dios? ¡No se dejen engañar! Ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los sodomitas, ni los pervertidos sexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los
calumniadores, ni los estafadores heredarán el reino de Dios . . . Pero el cuerpo no
es para la inmoralidad sexual sino para el Señor, y el Señor para el cuerpo” (1 Corintios 6:9,10,13, NVI).
“Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón” (Mateo 5:27-28).
El participar en cualquier tipo de pornografía es pecado y la paga del pecado es muerte. Cuando Israel vino a Gabaa, toda la tribu de Benjamín fue destruida por causa del pecado sexual.
Si usted no ha permitido ser corrompido por el material pornográfico – no comience. Permita que este programa le ayude a disuadirle. No vale la pena. Su cerebro es una cámara gigante y usted debe entender que cada figura distorsionada que usted ve queda grabada en su cerebro para ser recordada después. Ame a su futuro (a) cónyuge lo suficiente como para no entrar por este camino. Ámese a usted mismo (a) para aislarse de lo que distorsiona, domina, destruye, corrompe y sentencia.
Si usted es adicto (a) a la pornografía, hay una respuesta para usted.
A. Dios le ama pero odia su pecado. La pornografía no respeta a las personas. Un estudio reciente en algunos seminarios encontró que un 60% de los llamados al ministerio admitieron tener problemas relacionados a la pornografía.
B. Usted debe hacer elecciones firmes. “No pondré delante de mis ojos cosa injusta. Aborrezco la obra de los que se desvían; Ninguno de ellos se acercará a mí” (Salmo 101:3). Tome las riendas de su tentación. Confiésese a los que le pueden ayudar.
C. Pídale ayuda a Dios. ¡Vaya a Él ahora mismo!
D. Usted puede ser libre. El poder de la Cruz es para usted. Dios puede limpiar su mente. La sangre de Jesús tiene suficiente poder para liberarle. Jesús fue tentado en todos los aspectos y fue encontrado sin pecado. Una gota de Su sangre puede liberarle hoy.